Líneas horizontales en la fotografía

Una correcta organización y ponderación de las líneas horizontales constituyen uno de los elementos básicos para la composición y presentación de una fotografía, de manera que sea una obra entendible y que posea una estructura ordenada y armoniosa, pero ¿Qué son y en qué debo fijarme?

Las líneas te permiten guiar la dirección de la mirada a través de caminos definidos en la imagen, hacen que ésta fluya aportándole dinamismo, volumen, profundidad y posición. Dentro de una composición marcada a través de líneas o en parte a ellas, puedes encontrar una línea predominante que es la que guía con más fuerza tu mirada hacia el centro de interés. Estas líneas son las llamadas líneas de fuerza o dominantes.

La mayoría de imágenes que aprecias habitualmente contienen líneas que, sin saberlo, dirigían tu atención a algún punto en concreto de la imagen. Una vez te familiarices un poco con las líneas, puedes usarlas para hacer que el espectador de tu fotografía pasee por ella exactamente como quieres que lo haga; para indicarle qué camino debe seguir y cuál es el elemento que has decidido destacar. Las líneas horizonates tienen las siguientes propiedades:

  • Se ajustan mejor a formatos de encuadre horizontal.
  •  Pueden expresar distancia y amplitud a través de la relación con el horizonte.
  • Se consideran la base y son estables.
  • Evocan calma y descanso.

Pero ¿hay otro tipo de líneas en las que fijarme? Pues si, Hemos comenzado hablando de las líneas horizontales al ser quizás las más fácilmente identificables, pero la realidad es que en función de tu fotografía, y de tu habilidad, estas líneas pueden ser también verticales y diagonales.

  • Las verticales no son tan agradables para el ojo humano como los horizontales, sin embargo son los que mejor se adaptan a libros y revistas y por tanto muy utilizadas. Una composición donde las verticales tengan cierto protagonismo aportará una mayor sensación de velocidad que otra imagen dominada por horizontales. En función del motivo que las produzca pueden interpretarse como barreras o transmitir fuerza.
    .
    .
  • Las diagonales son, a menudo, horizontales o verticales transformadas por la perspectiva por lo que se asocian también con la profundidad o la distancia. Como puedes ver las líneas pueden modificar drásticamente la forma en que percibimos una fotografía. Las líneas diagonales son las que aportan una mayor dosis de inestabilidad y por tanto de movimiento y dinamismo a una fotografía. El ojo humano percibe las diagonales como una posición antinatural, temporal y transitoria. De tal forma que nuestro cerebro imagina que dichas diagonales evolucionarán hacia verticales u horizontales. Por ejemplo, si vemos una torre inclinada (como la de Pisa) nuestro cerebro interpreta que está cayendo y por tanto en movimiento.
    .
    .

.

El Punto de Fuga

Una vez somos capaces de localizar, manejar e interpretar las líneas que definen una fotografía, llegamos a una de las claves de una fotografía: el punto de fuga, que es básicamente el punto real o imaginario donde confluyen las líneas de una imagen, es decir, es donde se encuentran las líneas (reales o no) que proyectan los elementos de una imagen.

La imagen os lo va a aclarar bastante:

Una vez eres capaz de interpretar los juegos que las líneas trazan en cualquier encuadre, podrás crear imágenes de gran calidad tratando de entrelazarlas con su punto de fuga, así que prepárate para convertir todo lo que ves en una cuadrícula repleta de belleza.

Todos los derechos reservados por Sridhar Saraf

 

Todavía no hay comentarios, ¿Quieres ser el primero?

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Start typing and press Enter to search

Shopping Cart